Murcianos
ilustres: Isaac Peral y Caballero
Isaac
Peral y Caballero (1851-1895), ingeniero y marino español, conocido sobre todo por diseñar un submarino propulsado eléctricamente que revolucionó la navegación subacuática. Sus pruebas resultaron un éxito, pero la Marina española desautorizó el proyecto.
Nació el 1 de junio en Cartagena (Murcia). Ingresó muy joven en el Colegio Naval Militar de San Fernando (Cádiz) y en 1882 fue nombrado profesor de física matemática en la Escuela de Ampliación de Estudios de la Armada.
En 1885 puso en conocimiento de la Marina su proyecto de navegación submarina.
Las obras del torpedero submarino Peral comenzaron en el arsenal de la Carrara (Cádiz) el 23 de octubre de 1887 y se botó el 8 de septiembre de 1888.
El submarino consistía en una nave de ensayo de veintidós metros de eslora, pesaba 79 t en desplazamiento en superficie y 87 t sumergido. El casco, cuadernas y mamparas eran de acero e iba armado con dos torpedos.
Se sumergía mediante unos acumuladores eléctricos que suministraban
corriente a unas dinamos. Éstas, a su vez, por rotación, hacían girar dos hélices dispuestas en el eje vertical del submarino.
Las hélices iban hundiendo la nave hasta que su resistencia era inferior a la presión del agua. Aunque las pruebas definitivas tuvieron gran éxito, el Consejo Superior de la Marina no autorizó la construcción de nuevos submarinos.
Isaac Peral fue un excelente ingeniero eléctrico que concibió numerosos proyectos e inventos: el acumulador eléctrico, un varadero de torpederos (premiado con medalla de oro en la Exposición Universal de Barcelona en 1888), un proyector luminoso y una ametralladora eléctrica.
Fue un experto geógrafo y escribió dos libros sobre astronomía.
Fundó diversas empresas industriales, una de ellas en Madrid dedicada a la fabricación de acumuladores eléctricos, y montó las veintidós primeras centrales de alumbrado de España.
Murió en Berlín a donde se había trasladado para que le fuera extirpado un tumor cerebral.
El
casco del submarino Peral en el puerto de Cartagena a finales de los años 20.
El
mítico submarino Peral en un viejo cuento